DEFENDER LO PÚBLICO
Ser de izquierdas, hoy, es defender lo público. Porque lo público es lo común, el tesoro sin dueño que se puede repartir con equidad y que cuanto mayor sea más justa hará a una sociedad. A veces, la gente se pierde en disquisiciones acerca de qué significa ser de izquierdas, confundiéndolo con ser progresista. Así, se equipara ser de izquierdas con estar a favor del aborto, divorcio, matrimonio homosexual, etc. Desde esta perspectiva, muchas personas que se consideran de derechas pasarían sin quererlo a ser de izquierdas lo cual es, si no contradictorio, bastante curioso.
Al hilo de lo anterior, está claro que quien está a favor de dar dinero público para negocios privados -sean bancos, escuelas, universidades, hospitales, etc.- no es de izquierdas aunque desee aparecer como tal.