martes, 26 de enero de 2010

Egin-mina

Egin-mina
Jakin nahi izateak, hots, jakin-minak, mundua ulertzeko aukera ematen digu. Baina zer gutxi ulertzearekin konformatzea! Jakin-minak egin-minari bidea eskaini behar dio ustela ez izateko.

miércoles, 20 de enero de 2010

¡Que tenga razón Descartes!


¡Que tenga razón Descartes!

Sí, que las ideas sean reales, que los sueños se realicen, que quienes más amamos nos correspondan, que quienes se han ido retornen, que hagamos la realidad ideal y el ideal realidad. Sí, que tenga razón Descartes (y Hegel).

viernes, 8 de enero de 2010

Educación milagrosa

 (La diosa Panacea)

EDUCACIÓN MILAGROSA


   La Educación para la Ciudadanía se va a convertir, gracias al empeño de quienes toman las decisiones, en la panacea de todos los problemas que nos acucian. No importa si el problema es la discriminación entre las personas, los Derechos Humanos, el funcionamiento de los distintos estados y, por consiguiente, del nuestro, la globalización y sus consecuencias negativas…. Todo lo va a resolver esta asignatura, perdón, esta materia. Y, conforme los problemas se hacen carne por obra y gracia de la presión ‘mediática’, aparece un nuevo contenido que añadir a su bagaje. Lo último, por ahora, es la inclusión del tema referente a las víctimas del terrorismo.
   Si han reparado en la enjundia de los contenidos de Educación para la Ciudadanía, y lo que se dice esperar de su tratamiento en las aulas, supondrán, como es lógico, que las horas dedicadas a la misma sean acordes a la importancia que aparentemente se le da. Nada más lejos de la realidad: las horas semanales asignadas a dicha ‘materia’ son…..UNA. Es decir, que en 35 horas anuales, que son las que el Ministerio de Educación ‘obligó’ a las autonomías a establecer y que éstas aceptaron encantadas, salvo honrosas excepciones, se pretende ‘construir’ a personas ciudadanas. Se argüirá que, además de la Educación para la Ciudadanía que se imparte en 3º de la ESO, existe la Educación ético-cívica con dos horas semanales en 4º. Pues bien, si los contenidos de la primera rebosan la capacidad horaria atribuida, los de la segunda son el agujero negro que todo lo engulle. Si hay algún problema que a cualquiera se le ocurra imaginar, dentro de lo que denominamos las relaciones sociales, está incluido en su currículo.
   Quienes llevamos años dedicándonos a esta tarea no salimos de nuestro asombro al contemplar lo que se espera de nuestra labor.
   Hoy se usa y abusa del término ‘populista’ para señalar a quienes ejercen el poder de una forma que nos disgusta o simplemente para desprestigiarlos sin entrar en análisis profundos, pero quizás decaería su uso si hiciéramos un poco de autocrítica, porque veríamos en el espejo una imagen para nada agradable.